Mis apuntes de fotografía - Mi primera sesión en estudio 😎 (Parte II)

👩‍🏫 Nos situamos

Una vez tenemos todo el trabajo de pre-producción hecho y compartido con el equipo que participará en la sesión solo queda esperar que llegue el gran día 🙌.

Si ahora mismo estás desubicado y no sabes de qué te hablo es porque quizá no has leído mi anterior post en el que hablábamos de la estructura de una sesión de fotografía y de todo lo que tuve en cuenta en su primera fase, la pre-producción. Si no lo has leído, no te preocupes, te dejo el link aquí para que puedas empezar por el principio 😏. Si de lo contrario ya vienes con los deberes hechos, sigue adelante porque vamos a meternos de lleno en materia y empezar a hablar de la producción 😎.

📸 Producción

La producción es todo aquello que pasa durante la sesión de fotos. Aunque yo he decidido incluir todo lo que pasó el día de la sesión desde el momento en el que entré en el estudio (es lo que tiene ser la dueña y señora de este blog 🙄).

  • Hacerse con el espacio

Tómate tu tiempo para aclimatarte en el nuevo espacio. Si es la primera vez que trabajas allí y es también tu primera sesión de fotos agradecerás muchísimo tomarte este tiempo. Cuando pisé el estudio mi sentimiento de impostura luchó por hacerse hueco y empezaron todas las dudas: ¿qué hago aquí? ¡Pero si yo de esto no sé! ¡No va a salir ni una foto bien! ☹️ Vamos, modo drama en su mayor esplendor.

Me conozco muy bien y sé que esto en mi caso es simplemente pánico escénico y que para acallar a la bestia necesito un poco de tiempo a solas para hacerme con el control de la situación. Cada uno tiene sus estrategias y rituales, yo te cuento lo que hice por si a ti te faltan ideas 😉

Para empezar, cité al modelo 45 minutos más tarde, el tiempo a solas para mi es esencial para poder conseguir relajarme y estar lista. Me quité los zapatos pues andar descalza me relaja y ayuda a conectar conmigo misma (oye, no me juzgues que todos tenemos nuestras cositas 🫣). Hice una ronda de inspección por el estudio para ver los puntos de luz, tonos y texturas de las paredes, vistas y colores de lo que se veía desde las ventanas… Y saqué mi cámara, los objetivos, las baterías de recambio para dejarlos en un sitio en el cual podría tenerlo controlado y a mano durante la sesión. Con ayuda del iPad puse música inspiradora y localicé el moodboard que había hecho para darle un buen repaso. Y respiré profundamente. No sé si este va a ser mi ritual definitivo pre-sesión de fotos pero sin duda me ayudó a estar con la actitud necesaria para hacerle frente. Así que te animo a que crees tu propio ritual que te ayude a conectar contigo mism@ 😜

  • Pruebas

Con el moodboard fresco en mi cabeza y a tope de empoderamiento tras mi ritual empecé a montar algunos sets y a hacer pruebas con la cámara para acabarme de familiarizar con el entorno.

Yo ya venía con la idea de hacer la sesión con un objetivo fijo de 50mm (usé el M. Zuiko 25mm f1.8, equivalente a un 50mm para una micro 4/3) para poder dar mucha más luminosidad a las fotos, tener más margen para jugar con los desenfoques y poder así separar al modelo del fondo y que la atención de quien mirase las fotos se centrase en la persona. Fotografiar con un objetivo fijo requiere de más movimiento porque no tienes disponible la opción de zoom, pero te acostumbras rápidamente y más cuando ves los resultados 🥰. Aproveché este rato para probar con este objetivo y asegurarme que estaba familiarizada con él en ese espacio antes de empezar.

Las fotos que hagas en “vacío” no solo te pueden servir para practicar sino también como parte de tu portfolio o para integrarlas en las fotos de la sesión, como imágenes de transición entre los diferentes sets.

  • Llegada del modelo

Empiezan los nervios de nuevo cuando llega el modelo al estudio 😱. Creo que en este punto es muy importante recibir a la persona con actitud positiva y segura para transmitirle nuestras vibraciones. Lo primero que hice fue indicarle dónde podía dejar sus objetos personales y la ropa para los looks de la sesión. ¡Orden ante todo!

Una vez el modelo se situó, lo que hicimos fue revisar el espacio juntos, le expliqué mis ideas, cómo había planificado que avanzase la sesión y volvimos a mirar y comentar el moodboard juntos.

También es importante tener una conversación sincera con la persona sobre límites, conocer un poco sus miedos a la hora de posar, expectativas… En mi caso, el modelo era una persona con la que ya tenía confianza pero en el caso de tratarse de una persona desconocida esta conversación coge mucha más importancia. Dedica tiempo a conocer un poco la persona y aprovecha para observar sus gestos y expresiones 🧐 porque te va a ayudar a la hora de guiarle durante la sesión .

Además de conversar, yo decidí que antes de empezar a disparar haríamos juntos algunos ejercicios de relajación (respiraciones y movimientos para destensar los músculos de hombros, brazos, piernas y mandíbula) 🧘‍♀️. Aunque parezca una tontería, fue un momento divertido en el que conectamos, nos reímos y nos ayudó a diluir la tensión previa al inicio de sesión.

  • Empezamos a disparar

Las primeras fotos pueden ser un auténtico desastre, creo de verdad que las sesiones van de menos a más (aunque supongo que cuanta más experiencia tienen tanto el/la modelo como el/la fotógraf@ esto deja de cumplirse, será algo que comprobaré con el tiempo 😂).

No te frustres si en las primeras fotos no consigues los resultados esperados. En mi caso avisé al modelo de esto y no le enseñé ninguna foto hasta pasado un rato, sobre todo porque lo que queremos conseguir es que se relaje y coja confianza. Si la primera foto que le mostramos es un desastre, puede ser que se desanime y que esto tenga un impacto negativo en el resto de la sesión.

  • Mis claves para salir airosa y con buenos resultados de la sesión

Ya hemos ido comentando en los anteriores apartados algunas de las cosas que he aplicado yo para sobrevivir a la sesión. Ahora que estamos con nuestra cámara en mano también hay pequeñas cosas que podemos hacer que nos van a ayudar mucho:

Disparar MUCHO - Piensa que las expresiones de la cara cambian a cada milésima de segundo y puede ser que esa sea la diferencia entre una foto normal y la foto que buscamos. Yo preferí asegurar el tiro y activé el disparador secuencial de mi cámara para captar todos los matices aunque te adelanto que después va a implicar más trabajo durante la post-producción (hablaremos de ello en su debido momento 😉).

Baterías extras cargadas - Esto depende mucho de la cámara que uses pero yo te aconsejo llevar un mínimo de una batería extra bien cargada para asegurarte que tienes back-up. Sería una pena que la sesión tuviese que acabar repentinamente solo porque te has quedado sin batería, ¿no? Tenla a mano para que el momento del cambio interfiera lo menos posible en la sesión. La de mi cámara es pequeña y lo que hice es ponérmela en el bolsillo de mi pantalón.

Colores - Escribí un post enterito sobre el color que te recomiendo que leas antes de ir a la sesión (te dejo el link en el apartado Enlaces 😊), pues te puede ayudar a planificar cosas como el vestuario, fondos… Yo, por ejemplo, con los nervios hice algunas fotos en las que el modelo llevaba camiseta blanca contra un fondo blanco sin ningún elemento más de contraste 😪. Esto hace que la foto no acabe de funcionar cuando la miras pese a que la pose del modelo es interesante. De todo se aprende pero te aviso porque si tú te lo puedes ahorrar pues mejor 😉. Recuerda que el color es también un elemento importante a tener en cuenta 🌈.

Positividad y empatía - Evita mirar las fotos que vas haciendo y poner caras de desagrado o hacer suspiros exagerados pues le estarás enviando señales negativas al modelo que pueden afectar a su autoestima. Recuerda que nuestro trabajo como fotógrafos no es solo disparar sino guiar a la persona para conseguir unos resultados. Así pues, la responsabilidad del éxito de la sesión no recae solo en el/la modelo, sino también en el/la fotógraf@. Dirígete a la persona de forma positiva, cambia un: “esta postura no está bien” por “vamos a explorar esta otra postura”. Hemos trabajado mucho para conseguir un ambiente de confianza y buenas vibraciones, es nuestro trabajo contribuir para poder mantenerlo.

Paciencia y pasar página - Ten paciencia con la persona que fotografías pero también contigo mismo. Recuerda que es la primera vez que haces esto y que estás en pleno proceso de aprendizaje así que es normal que tardes varios intentos en conseguir el resultado que buscas. También es importante que persistas pero que seas capaz de ver en qué momento tienes que pasar página. Puede ser que algunas ideas sobre el papel o en tu cabeza queden maravillosas pero que por el motivo que sea no funcionen a la práctica. NO PASA NADA, hay que aceptarlo y seguir adelante con una nueva idea 💪.

Oídos y mente abierta - Cuando trabajas con otras personas es importante aprender a escuchar. Puede ser que las personas que intervienen contigo en la sesión te propongan nuevas ideas. No dejes que tu ego las descarte sin haberlas valorado antes. Yo me di cuenta que esto de las sesiones es un trabajo en equipo y que para lograr el éxito y la satisfacción es importante que todos los participantes se pongan en el mismo nivel. Escucha atento, considera y colabora.

Experimentar con la luz - Si como yo te animas a incorporar luz artificial a la sesión y es tu primerita vez, te recomiendo que te armes de paciencia y, sobretodo, que experimentes. La luz da para una serie de post enteritos (espero algún día llegar a dominarla lo suficiente como para poder escribir sobre ello) así que CALMA. Prueba diferentes esquemas de iluminación, diferentes intensidades, ve disparando y compara los resultados. No tengas miedo de decirle al model@ que es la primera vez que usas luz artificial y que vas a experimentar durante la sesión. Mostrarte vulnerable no es malo, al contrario, en muchos casos te va a ayudar a conectar de una forma mucho más profunda con los demás 🤗.

Moodboard siempre a mano - Una imagen vale más que mil palabras y habrá momentos en que es precisamente eso lo que nos salvará. A veces nos puede costar expresar al modelo cómo nos gustaría que posara pero TRANQUILIDAD porque si solo con palabras no somos capaces podremos recurrir a nuestro moodboard. Como ya te he comentado, tenlo siempre a mano tanto para usarlo en estos momentos en que puede costar expresar una idea o también para recurrir a él en algún momento en el que te quedes bloqueado.

DISFRUTA - Pásatelo bien, disfruta del momento, déjate llevar, emociónate, juega… recuerda que estás haciendo algo que te motiva y te apasiona. Conecta con el disfrute durante la sesión para llevarte un buen recuerdo del día. Esto no solo va a tener un impacto positivo en ti sino en la gente que te rodea.

Te lo he ido repitiendo durante todo el post pero quiero que recuerdes lo siguiente antes de acabar por hoy: Empezar cosas nuevas es excitante pero a la vez nos genera miedo, frustración… Es normal sentirse así, no eres ni la primera ni la última persona a quien le pasará. Recuerda respirar profundo o buscar cualquier miniestrategia que te ayude a conectar con el aquí y el ahora y recuérdate que lo estás haciendo MUY BIEN 👏, que eres un/una valiente porque dar el paso es difícil y las primeras veces siempre son las más complicadas.

Y con todo esto cerramos la producción. Ya casi estamos a punto de cerrar la serie de posts sobre Mi primera sesión en estudio fotográfico, solo nos quedará pendiente hablar de post-producción. Pero como eso da para otro post enterito, tendrás que estar atento las próximas semanas para leer la última entrega 😜.

🌐 ENLACES

  • Mis apuntes de fotografía - Mi primera sesión en estudio 😎 (Parte I) (link)

  • Mis apuntes de fotografía - Colores 🌈 (link)

Como siempre, muchas gracias por leerme 💙

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